La microdiscectomía: cirugía de última generación para la hernia de disco lumbar
La microdiscectomía es una de las intervenciones quirúrgicas más novedosas para tratar la hernia de disco lumbar. Su realización está recomendada en el caso de daño neurológico producido por la compresión que una hernia discal ejerce sobre la médula espinal o las raíces nerviosas que llegan hasta las piernas.
También está indicada ante el fracaso de los tratamientos conservadores que terminan provocando una mala calidad de vida del paciente.
Una intervención mínimamente invasiva
Las ventajas que ofrece la microdiscectomía son múltiples. En primer lugar, el doctor cuenta con una visión muy precisa de la zona dañada gracias a un microscopio de última generación para visualizar el disco y los nervios. La vista ampliada proporciona al cirujano los medios para realizar una incisión más pequeña y, por tanto, menor daño al tejido adyacente.
Por otro lado, al ser la incisión tan minúscula no es necesario desestabilizar ningún elemento óseo o ligamentoso. Esto supone un gran avance con respecto a las primeras operaciones de columna lumbar. Para simplificar: con la microdiscectomía el médico se limita a eliminar la compresión y el fragmento de disco del núcleo pulposo que se sale y comprime la médula.
Un postoperatorio rápido y sencillo
El paciente debe ingresar 24 horas en el hospital y al día siguiente de la intervención (que suele durar entre 45 minutos y una hora) comenzará a levantarse y a dar pequeños paseos ayudado con un corsé ortopédico. Ese mismo día podrá marcharse a su domicilio.
Durante el primer mes, la rehabilitación asistida consistirá en andar diariamente y realizar pequeños ejercicios. Tras la primera revisión se le retirará el corsé y dará comienzo la rehabilitación para tonificar poco a poco la musculatura. Con esto se consigue que la persona pueda retomar su vida normal en unos dos meses.
¿En qué casos es necesario realizar una microdiscectomía de urgencia?
La aparición de un problema neurológico es una de las dos situaciones en las que está indicado este tipo de intervención para hernia de disco lumbar. El síndrome de cola de caballo es el más grave de cuantos se producen y tiene lugar por la compresión de las raíces nerviosas de la base de la columna vertebral. Puede llegar a provocar pérdida de sensibilidad en las piernas, la vejiga, los esfínteres urinarios y anales. En caso de que no se llegara a operar a tiempo las secuelas podrían ser crónicas.
¿Cuándo se empieza a notar la mejoría tras la operación?
Dependiendo del tiempo que lleve el enfermo con esta patología, la mejoría se produce de manera casi inmediata. Por ejemplo, un paciente que no llevara más de tres o cuatro meses con la hernia discal, podrá notar cómo al despertarse tras la intervención ha desaparecido el dolor de su pierna. Únicamente sentirá las molestias locales causadas por la incisión que no requerirá más de cinco o seis puntos de sutura.
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